Año nuevo, sección nueva. Como persona tendente a shippear fuerte que soy (y quien dice shippear fuerte dice chillar a la pantalla que se besen y sufrir convulsiones en el suelo) propuse a la corte del Reino esta sección en la que hablaremos de los principales ships de esas series que tanto nos gustan, esos que provocan guerras internas en los fandoms y… ¡Decidiremos! Aviso a navegantes: conste que esto que sigue es mi opinión personal y, por tanto, SUBJETIVA (superloco, ya lo sé). Si estáis en desacuerdo recordad que podéis shippear lo que os salga del ano y no pasa nada. Las opiniones son como los culos: todos tenemos uno.

Empezamos con The 100 porque acaba de regresar no hace mucho, está on fire y por aquí es una serie a la que tenemos un cariño especial (vamos, que nos mola bastante y no paramos de recomendarla). Y esto va a ser un campo de minas SPOILERS, así que andaos con ojo.

En la evolución también ha sido importante cubrir a Clarke de mierda

En esta evolución también ha sido importante cubrir a Clarke de mierda

Si por algo ha demostrado The 100 ser interesante, es por pasarse los clichés por el forro y, más difícil todavía, hacerlo tras haber empezado siendo bastante cliché. ¿Que Clarke pinta como la típica protagonista mona e inocente de moral intachable que no tiene ni gota de maldad en el cuerpo? Pues la convertimos en una líder molona y moralmente ambigua, la hacemos un personaje tridimensional y la bautizamos como “comandante de la muerte”. ¿Que desde el minuto uno se ve venir que el guapo chico protagonista se ligará a la guapa chica protagonista y harán la típica historia de amor con triángulo amoroso incluido sin mucha más sustancia? Pues los metemos a todos en un membrete, hacemos que Clarke lo mate, que ella y su exnovia se hagan amigas, y descubrimos que Clarke es bisexual sin hacer ningún drama con ello y mostrando de forma natural que se puede enamorar posteriormente de una chica. Y aquí entra Lexa y los grounders y toda esa amalgama de decisiones imposibles y conflictos que parecen no tener solución. Coincide con un momento en el que la serie pega un subidón de calidad importante (y no, la primera temporada no es malísima como decís algunos, pero hay un cambio porque la serie se vuelve más oscura y atrevida), así que Clexa va ligada en paralelo a este desarrollo y a este atrevimiento. 10.000 puntos para Slytherin (porque todos sabemos que Clarke es Slytherin).

Química, tetes

Esto es química de novias y amantes, tetes

Clexa nació de la química entre actrices, sin que el ship estuviese preparado de inicio y esto no es malo, sino más bien todo lo contrario. Estamos en un momento televisivo en donde que dos chicas o dos chicos tengan química romántica puede llevar a que realmente dicha pareja se haga canon, algo que hace años sería impensable porque no se atreverían, por más que la pareja chica-chico de turno no tuviese ni la mitad de química y resultase forzada y metida con calzador para cumplir. Todavía es más, muchas series siguen sin atreverse a dar este paso… ¡y estamos en 2016, señores! No sólo tienen muchísima química, sino que su dinámica como pareja ofrece muchas posibilidades narrativas, al tratarse de las líderes de dos bandos en principio enfrentados, de una edad similar y obligadas tan jóvenes a asumir dicha posición de responsabilidad, pero con dos estilos de liderazgo distintos que las coloca en posturas enfrentadas y, al mismo tiempo, complementarias. De esta manera, con el paso de los capítulos Clarke y Lexa parecen aprender la una de la otra progresivamente y están en un limbo constante de tensión sexo-romántica y admiración mutua creciente que, definitivamente, tenía que explotar por algún lado. ¡Y boom! Confesión de amor, beso y ovarios por el suelo. Clexa es canon. Clarke es bisexual. Get over it.

Igual si sois shippers de Bellarke pensaréis: ¿Cómo? ¿Es que no ves química entre Bellamy y Clarke? Pues no, jamás he visto química ni romántica ni sexual entre Bellamy y Clarke. Siempre los vi como amigos, también en la primera temporada cuando todavía no había salido Lexa, así que soy incapaz de ver eso que ven las y los shippers de Bellarke. Los entiendo como BROTP y creo que eso es bonito, pero intentar forzar una pareja porque sí, porque son chico y chica protas y “tiene que ser así”, como si respondiese a una especie de destino superior heteronormativo, me parece bastante estereotípico. Es más, me toca un poco el coño que por defecto se empareje a la chica y al chico protagonistas en todas las series, me molesta eso de que un chico y una chica (en este caso heterosexual y bisexual) tengan que tener algo por cojones y no puedan ser amigos.

Química de amigos. ¿Veis? Es fácil.

Química de amigos. ¿Veis? Es fácil.

Para mí la posibilidad de Bellarke sería como Meredith y George en Anatomía de Grey, algo que nunca debió haber ocurrido, algo incómodo porque eran amigos y no salía de ahí. O como Jenny y Shane en The L Word, una amistad que nunca debió haber pasado de amistad porque la química era la que era y resultaba doloroso de ver. O como Rachel y Joey en Friends, una completa herejía. Pensadlo bien, ¿cuántas amistades BFF entre un chico y una chica que se sienten atraídos por el sexo contrario sois capaces de enumerar sin que en algún momento de la historia haya existido un algo, una tensión, un interés por alguna de las dos partes o incluso un escarceo pasajero? Porque no son tantas. Y creo que es una pena, opino que es un tipo de relación que debería verse más en televisión. Bellarke es una buena representación de esto: cuando quieren hacen un gran equipo, son amigos y se preocupan mutuamente por el otro (aunque aquí me reservo opiniones tras los últimos acontecimientos) y… ¡Sorpresa! ¡No se quieren acostar juntos ni uno anda suspirando detrás del otro por su amor no correspondido! ¡Locurote!

Os equivocaríais si creyeseis que por shippear Clexa odio a Bellamy y le deseo la muerte o algo así, cosa que he visto mucho al contrario, demostrando lo poco aceptado que está todavía que tíos se enamoren de tíos y tías de tías en televisión. Bellamy me cae muy bien cuando deja las machiruladas a un lado y muy mal cuando hace todo lo contrario, es decir, cuando se ciega en su rollo de impulsividad testosterónica y hace estupideces como en la primera temporada y lo que llevamos de la tercera. Insisto, su amistad con Clarke es importante, pero Bellarke no existe en los mismos términos que Clexa. No capto ninguno de los argumentos que veo a favor de Bellarke, tampoco ese de que son canon en los libros y tiene que pasar sí o sí. La historia se basa en ese material de partida, pero es totalmente distinta, los personajes son polos opuestos y algunos ni existen, las tramas no tienen nada que ver y creo que The 100 ha adelantado EN TODO a los libros en los que se inspira (creedme, en comparación, son bastante mediocres).

I rest my case

I rest my case

Dicho esto, si todavía queréis shippear Bellarke estáis en vuestro derecho. De hecho, os animo a ello y a llevarlo sanamente, aunque yo no lo vea por ningún lado. Muchas personas queer nos hemos pasado toda la vida shippeando cosas que no eran canon (porque era lo que teníamos), nos hemos inventado historias simplemente con miradas, hemos estado en esa posición. Tranquilidad, por experiencia propia os recuerdo que no tenéis que aferraros a que sea real para shippearlo. En este caso no lo es y no pasa nada. ¿Que un ship entre un chico y una chica no es canon por una vez? ¡Madre mía! ¡Qué terrible injusticia!

Conclusión: En esta guerra de ships la balanza se decanta por Clexa sin ningún tipo de duda. En oposición a Bellarke, la química de Clexa quema en cada maldita escena. Si por separado ya son dos personajes femeninos fuertes, carismáticos y molones; juntas dan la impresión de poder gobernar la Tierra. Su trama tiene toda la pinta de gran historia épica, de luchar en guerras juntas, de tener que superar todo tipo de tragedias, desencuentros y sufrimientos en un mundo duro y complicado. No es un ship fácil, no se basa en un cliché, nace en el propio desarrollo de la historia, es coherente con ella y con los personajes e, insisto, ES JODIDAMENTE ÉPICO. Clexa son como Xena y Gabrielle pero en una época en la que afortunadamente el subtexto ya no nos hace falta. Son como Logan y Veronica, una “historia de amor épica, que abarca años y continentes, vidas arruinadas y baños de sangre”. Clexa son… como Bisbal y Chenoa cantando Escondidos y exudando tensión sexual por los poros. Es esa química exagerada, ese amor latente, el que arrastra hacia Clexa. Y, además, son un ship necesario y valiente, que nos descubrió a The 100 como una serie dispuesta a representar de la mejor manera posible al colectivo LGBT+.

La química se tiene o no se tiene, queda demostrado

La química se tiene o no se tiene, queda demostrado

¿Vosotros también sois #TeamClexa? ¿Tenéis otros argumentos a favor de #TeamBellarke? ¿O sois suertudos y shippéais ambos, así que estáis encantados de cualquiera de las dos maneras? Contádnoslo, pero recordad algo: Clarke es BISEXUAL. Ni era hetero cuando estaba con Finn, ni es lesbiana cuando está con Lexa, ni una ni otra relación invalida a la otra. Es bisexual, es oficial, lo han confirmado unas 1647683 veces, así que cualquier argumento que peque de bifóbico ahorráoslo, chiquis. También cualquier comentario homófobo. Y no defendáis a un ship insultando al contrario, haced el favor, que sabemos que sois una audiencia inteligente.

Ship and let ship.

P.D: Nótese que no he hecho ninguna referencia a los fandoms, elenco y entorno de la serie, porque aunque eso reforzaría Clexa por mil, he querido centrarme sólo en el contenido de la serie. ¡Sed felices shippeando vuestras cosas! Peace out.

Si te ha interesado esto SEGURO que quieres ver a Lexa endiosada por el reino, así que leer: Diosas del Reino – Lexa – The 100 y si lo tuyo son Los 100 en general: Adoptando a… Murphy of the Sky People (The 100) y un tutorial de cómo convertirte e uno de ellos: Cómo ser un Grounder en The 100 en 4 pasos