En España no todas las series son nacionales, no. Algunas autonómicas también se lanzan a producir ficciones y los resultados son dignos de mención. Quien se lleva el gato al agua siempre es Cataluña que llegó a su clímax con Polseres Vermelles, una serie que marcó un hito logrando cruzar fronteras llegando a emitirse no solo en Antena 3, sino por todo el mundo, o la interesante Cites. Pero no hace falta irse a grandes éxitos. Quien más, quien menos, todo el mundo ha oído hablar de alguna serie catalana.
La otra cara de la moneda suele ser Galicia, la gran olvidada. Una comunidad donde hemos llegado a tener seis series en producción simultánea. No solo el éxito de audiencia avala estas ficciones, también han ganado premios y, sin duda, han marcado la ficción nacional. No en vano buena parte del talento que hoy domina en las nacionales trabajó antes en las series gallegas.
Así que, recordando que mañana 25 de julio es el Día de Galicia, quiero aprovechar para poner en valor el audiovisual de esta mi comunidad (siempre he querido decir esto) señalándoos cinco series clave en nuestra ficción.
La primera de todas ella quizás sea la que más os suene. Mareas Vivas es la Médico de familia gallega. No por temática o historia, no, sino por la revolución que supuso: una nueva forma de hacer series y, sobre todo, exitazo de audiencia. No solo fue la que abrió la puerta a todas las series que vinieron después, también rompió fronteras emitiéndose, entre otras, en Telemadrid.
As leis de Celavella fue una serie de dos temporadas que pasó más desapercibida. Fue una adelantada a su tiempo. Cuando nadie hacía series históricas, TVG apostó por un policíaco de misterio ambientado a principios del siglo pasado. Una delicia de guion y una maravilla de ambientación que pudimos disfrutar durante dos temporadas. Sin embargo, la serie no murió ahí. Su esencia volvió años después dentro del Gran Hotel de Antena 3, serie con la que no solo guarda grandes paralelismos, sino que también comparten equipo.
En un momento en que las series todavía eran blancas y familiares y en una cadena enfocada a una población muy envejecidad alguie tuvo de pronto la genial idea de hacer una serie sobre narcotráfico. Un thriller con toques de melodrama que reflejaba lo más oscuro de la sociedad gallega. Eso que siempre había estado ahí y que muy poca gente se había atrevido a contar. Matalobos fue una apuesta arriesgada, una locura que salió muy bien. Viejos y jóvenes pegados al televisor para ver una serie con sello visual propio, sin referente en España, que sorprendía semana a semana con sus numerosas muertes y giros y que puso al espectador contra las cuerdas al poner como protagonista ¡al malo malísimo! Un serión que ha cosechado premios internacionales y que me consta que las cadenas nacionales han barajado seriamente adaptar.
En España no existen las comedias de media hora. ¡JA! Las que parece que ya se han extinguido son las de 50 minutos, como Aida. Pero de 30 sí hay una y está en Galicia: Luci. Ya en su día os hablé de esta comedia de situación protagonizada por la genial Nuncy Valcárcel en la piel de una casi cuarentona recién divorciada que, para seguir con su vida, debe enfrentarse al mundo entero. 26 minutos dura cada episodio. ¡26!
Y para terminar, otra serie de la que también ya os he hablado: Serramoura. Un ejemplo de que, con poquito dinero, en Galicia siguen haciéndose bien las cosas y merece la pena no perdernos de vista. Mezcla de géneros, asumiendo riesgos y buscando formas de sorprender al espectador no solo contando cosas nuevas, sino contándolas de forma novedosa. Una serie sin estructura fija, en donde los personajes vienen, nos cuentan su historia y se van. Nunca sabes qué nuevo deparará cada nuevo capítulo y eso, aún no lo hemos vivido en la televisión nacional, donde todo suele estar demasiado encorsetado.
Debe ser que la necesidad agudiza el ingenio. Galicia siempre ha sido el primo pobre, pero no por ello el primo tonto. Al contrario. Hemos conseguido que menos sea más. Hemos compensado con talento todo aquello que no podemos pagar y, aunque no todo lo que se produce aquí es brillante, será mejor que no perdáis la pista a las series gallegas porque esta gente y estas ideas pueden ser quien lo acaben petando en las series nacionales -e internacionales, que ahí está Bambú con The Refugees– del mañana.
Se te olvida una de las mejores series gallegas de todos los tiempos, Padre Casares, de la que actualmente se está emitiendo la última temporada en TVG. Esta serie ha sido versionada en IB3 como Mossén Capella, en Canal Sur como Padre Medina y en la Comunidad Valenciana como Senyor Retor y se emitió en Telemadrid y Castilla la Mancha Televisión doblada al castellano.
Cierto! Padre Casares también tiene su mérito, además de estar protagonizada por Pedro Alonso, que ahora es un fundamental de las series de Bambú. Pero tenía que quedarme con 5. Hay muchas más importantes 😉